
No está gorda, pero a ella no le importaría. Recientemente ha hecho unas declaraciones a la revista "Britain's Star magazine" en las que manda recaditos como estos:
"Yo me deprimo en L.A. Sólo porque no uso la talla cero, no estoy bronceada ni soy rubia se me escudriña.
Pero no quiero ser delgada. Lo siento por las chicas que aspiran a tener la talla cero. Ser diferente está bien. No entiendo porqué todo el mundo está obsesionado por convertirse en clones."
Y añade: "Son como ovejas. Esas chicas no comen, se meten los dedos para vomitar... se matan a sí mismas ¿y para qué? su propia vanidad!! Es triste. No creo que sea tan guay parecer una recién salida de Auschwitz."
Ale!!! no te digo nada y te lo digo todo. Sólo añadiré un par de cositas, querida Kelly:
1. si, las famosas están obsesionadas por su delgadez, eso lo sabe tooooooooooodo el mundo -no vas a descubrir las américas tú ahora-.
2. el rollito ese de soy-gorda-y-orgullosa-de-serlo ya está muy trillado. Como decía Margarita Boladeras -esas clases de ética!! te acuerdas Bellatrix??- "con eso no aportas nada nuevo a la clase".
3. es verdad que todas las famosas delgaduchas parecen clones, pero también es verdad que todas las famosas entraditas en carnes decis lo mismo al respecto -o sea, que también eres como una oveja, pero de otro rebaño-.
Aish... que se pone una a criticar y no se le acaba el tema...
by Medusa.
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