Pobre Surita...

Por si ser la hija postiza -que no biológica- de Tom Cruise no fuera lo bastante malo, por si tener una madre capaz de dejar a su novio-futuro marido-padre de su hija para casarse con un chiflado que catapultaría su carrera como actriz no fuera lo bastante triste, ahora la pobre Surita tiene que enfrentarse a una nueva desgracia juvenil...

...la soledad.

Papá postizo Cruise controla hasta la última mota de polvo que se acerca a la niña, Katie no hace más que pasarse el día de compras con la cría a cuestas, y las pocas veces que la llevan al parque va vestida con unos trajecitos de marcas carísimas que, por supuesto, no puede ensuciar jugando. Al parecer la pobre Surita está tan desesperada que cuando ve niños de su edad se abalanza sobre ellos y los abraza, como si fueran una cosa extraordinaria que no pudiera verse a menudo. Una pena.

Al parecer la causa del aislamiento de Surita es que sus padres no se fían ni de su sombra. Son tan quisquillosos con los niños -y con los padres de los niños- que ninguno les parece lo bastante fiable como para ser amiguito de Surita.

Ellos dicen que temen posibles comentarios hirientes para la niña con respecto a su familia. Bien, solo dos cositas, señores Cruise:

1.- la crueldad de los niños está científicamente demostrada.

2.- cuanto más tarde en relacionarse con otros niños más se van a reir de ella cuando lo haga.

Con lo bonita que les ha salido la niña a Katie Holmes y Chris Klein -SÍ, SU VERDADERO PADRE!!!- y lo que le queda por pasar a la pobre...

Lo dicho, una pena.

by Medusa.